Como si estuvieran conversando con un amigo. O escuchando los consejos de un buen padre. Con el cariño de quien comprende. Con la exigencia del inconformista. Así se sintieron en la noche del pasado lunes 5 de septiembre los colegiales de Belagua con el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla. Tuvieron un coloquio donde José Ignacio pudo contarles sus experiencias como Obispo. También les habló de lo vivido hace poco más de un mes, en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Polonia: “Vivimos muchos momentos de alegría, que han hecho que el corazón de los jóvenes haya cambiado de paradigma. Necesitamos experiencias, referentes que nos ensanchen el horizonte”.
Los colegiales pudieron mantener un coloquio con José Ignacio, preguntado con naturalidad sus inquietudes.
También aprovechó la reciente canonización de Santa Teresa de Calcuta para hablar a los colegiales de ella. Recordó una frase de esta que le marcó profundamente: “Soy un lápiz escogido por Dios para escribir una carta de amor al mundo”. Y añadió Munilla: “Y el lápiz hay que afinarlo, ¿eh? ¡Aunque cueste!”. E invitó a los que le escuchaban a que se planteasen grandes horizontes, grandes retos: “Somos un instrumento para los demás.